Estructura objetiva, datos reales, elementos visuales y confianza. Estos son algunos de los ingredientes para el pitch perfecto que te dará ese “sí” que tanto esperas de tu jefe. En este artículo veremos 5 estrategias sobre cómo hacer un pitch perfecto. También podrás descargarte una plantilla totalmente personalizable.
¿Alguna vez has tenido una idea brillante y no has sabido cómo presentarla a tu jefe? ¿O necesitaba una aprobación urgente para un proyecto? ¿O una contratación en tu equipo y no has podido convencer a los directivos?
Es entonces cuando la elaboración de un pitch puede ser la mejor estrategia para convencer a tu jefe. O incluso a los directivos de la empresa. Pero, después de todo la pregunta es, ¿cómo hacer un pitch desde cero? ¿Qué hay que tener en cuenta? ¿Por dónde empezar?
A continuación, veremos una guía paso a paso para hacer un pitch perfecto y conseguir la aprobación de tu jefe en cualquier idea o proyecto.
Tabla de contenidos
- Primero, ¿qué es un pitch?
- 5 estrategias para convencer a alguien
- ¿Cómo hacer un pitch?: tipos de pitch
- Cómo hacer un pitch desde cero: paso a paso
- 💡 Descarga la guía completa y la plantilla totalmente personalizable
- Ejemplo de la estructura de un pitch perfecto
- ¿Por qué hacer un pitch?: la importancia de hacer el pitch perfecto
Primero, ¿qué es un pitch?
Ya sea para presentar una idea, presupuestos o un nuevo proyecto. Saber organizar y planificar lo que se va a decir es esencial para convencer a los demás.
Cuando un argumento está bien presentado y va directamente al grano, es más fácil entender lo que se dice. Por lo tanto, las posibilidades de éxito aumentan considerablemente. Es en este contexto donde el pitch aparece como la forma perfecta de resumir lo que hay que transmitir.
Esta estrategia puede utilizarse en diferentes contextos y situaciones empresariales. Sin embargo, hoy vamos a destacar cómo el pitch puede ayudarte a convencer a la dirección de tu empresa. Para que apruebe tus ideas de forma rápida, profesional y objetiva.
5 estrategias para convencer a alguien
1. Conoce a tu audiencia
Antes de comenzar a preparar el pitch es esencial estudiar y analizar quién es tu público. A quién vas a tener que convencer de tu idea. Al hacer esta investigación vas a poder conocer mejor cuál es el contexto de sus necesidades. También te va a permitir encontrar recursos que te ayuden a estrechar vínculos y a conectar mejor con tu público. Conocer sus preferencias o sus enfoques favoritos ayudan a guiar la conversación y la intención del mensaje.
¿Sabes a quién le tienes que presentar tu idea? ¿Conoces qué función desempeñan los altos ejecutivos de tu organización? ¿Qué enfoque utilizarás para presentar tus ideas? Estas son algunas de las preguntas que te debes hacer antes de llevar a cabo un pitch.
2. Conecta con tu público
Es muy recomendable practicar tu presentación, lo que vas a decir y cómo lo vas a hacer. Pero teniendo en cuenta que debe resultar natural y no se debe percibir como algo muy preparado o guionizado. De este modo además de presentar información basada en datos reales. También debes conectar con tu audiencia a un nivel emocional. Esa conexión se puede lograr a través de historias y ejemplos concretos. Esta parte del discurso ayudará a despertar la atención y la curiosidad del receptor.
3. Utiliza la comunicación persuasiva
No se trata solo de lo vas a decir, sino de cómo vas a decirlo. Y es que, ¿cuántas buenas ideas se pierden por no saber presentarlas de manera correcta? ¿O cuántas veces te has quedado sin palabras en una reunión cuando alguien ha atacado tu propuesta y no has sabido defenderla por falta de argumentos?
Por eso, para poder convencer es necesario dominar la comunicación persuasiva. Así podrás determinar las ideas que son tenidas en cuenta y las que se quedan en el camino. Y es que, persuadir es sinónimo de convencer. Lo más valioso con lo que cuenta una empresa son las personas y las ideas que producen. En definitiva, eso es lo que determina el éxito de las organizaciones.
4. Cuantifica la información al máximo
Si te vas a reunir con altos directivos o con inversores y buscas convencerles de tus ideas o nuevas propuestas. Debes cuantificar toda la información al máximo e iniciar la conversación con un titular claro y llamativo.
Para ello es necesario ir muy preparado para poder defender tu idea y tener respuestas a sus preguntas. Demuéstrales que has hecho tu tarea. Que realmente comprendes los datos, las finanzas y que has interpretado los escenarios y las decisiones clave. Esto le dará al receptor la seguridad de confiar y creer que tu idea es un valor seguro.
Un ejemplo de esto lo podemos ver en el feedback de Jordi Romero, CEO de Factorial, en uno de los pitch to investors de Itnig.
Nos has dado muy poca información en estos 3 minutos. Me quedo con muchas preguntas. ¿Quién eres tú? ¿Quién es tu equipo? ¿Inversión? ¿Dinero hará falta para lograr los objetivos? ¿Cuánto tiempo vas a tardar en sacar adelante el proyecto? Más densidad de información me ayudaría a tener una imagen más clara de la idea y el objetivo.
Por ello, es fundamental ir muy preparado con cifras, datos y números. Para poder defender tu idea de manera clara y concisa en un breve espacio de tiempo.
5. Elige el momento adecuado
Para ello deberás tener en cuenta los siguientes factores:
- ¿Cómo está funcionando la empresa? Es importante entender la situación actual de la organización. Saber si se están llevando a cabo grandes cambios. O si se están tomando decisiones importantes. Para entender si es el momento justo para presentar tu proyecto.
- ¿Cómo está tu manager o líder? Es relevante saber si tu manager está estresado. O si tiene mucha carga de trabajo para proponer una fecha o una hora determinada. Además, si se pospone la reunión, debe quedar claro que si se produce un retraso es porque es un asunto importante para el cual se requiere toda la atención.
- ¿Cómo se encuentra tu manager a nivel personal? Comprender su situación personal, en casa o familiar. Esto te ayudará entender si es el momento adecuado para hablar con esa persona o si necesita más tiempo.
¿Cómo hacer un pitch?: tipos de pitch
Existen diversos tipos de pitch. Cada uno se debe elaborar acorde al contexto y situación en el cual se presentan. La elección del estilo, dependerá de las circunstancias, audiencia, idea, proyecto etc.
Los tipos de pitch se pueden clasificar en 5 estilos diferentes: Twitter Pitch, Rocket Pitch, Pitch Deck, Elevator Pitch y Pitch de Ventas o Comercial.
Twitter Pitch
El Twitter Pitch se puede definir como “saber venderse” a través de las redes sociales. Ya sea para encontrar trabajo o para prosperar profesionalmente.
Se trata de una presentación clara y concisa. Como la de un posteo de Twitter de unos 140 caracteres. Esta debe contener una oferta enfocada a una audiencia definida.
Además, tiene que resolver el problema expuesto y necesita contar con una “fórmula secreta”. Como por ejemplo, que aportas de interesante que pueda destacar sobre el resto de ideas o candidatos.
Rocket Pitch
Por lo general, se utiliza para su presentación en concursos y aceleradoras. Va desde el minuto hasta los tres minutos de extensión, teniendo que ser claro, preciso y cool. Este tipo de pitch debe contener una idea, un producto, un mercado, un negocio, un equipo, la tracción del trabajo y un plan del proyecto.
Pitch Deck
Este tipo de pitch ha iniciado a ser cada vez más popular en los últimos años. junto con el auge de las startups.
Un Pitch Deck, se trata de una breve presentación en la que se da una visión general de un negocio a los inversores. En este tipo de exposiciones se suele mostrar el producto, plan de negocio, estrategia de monetización y el equipo, entre otras cosas.
A pesar de la brevedad de las presentaciones. Crear un Pitch Deck no es fácil. Y aunque cada empresa es diferente, existe un formato que funciona y suele generar interés entre posibles inversores. Por eso, para elaborar un buen Pitch Deck debes tener en cuenta los siguientes aspectos:
- Prepara una presentación corta, que transmita las ideas más importantes de forma directa.
- Deja espacio para preguntas.
- Crea un vínculo emocional con las ideas. Cuéntalo como una historia y mantén el interés.
- Se realista a la hora de presentar la idea de negocio.
Elevator Pitch
Se utiliza por lo general en el contexto de una competencia o en un encuentro casual. Se trata de exponer tu proyecto o idea a un cliente, inversor, jurado o jefe en una breve duración de tiempo de entre 1 y 2 minutos. El objetivo de este tipo de pitch es captar la atención y generar interés. Para así lograr una segunda reunión. Una vez captada la atención lo interesante de este tipo de pitch es por la interacción posterior.
Preparar un discurso en este formato también puede servir a la hora de buscar empleo, por ejemplo. Estas son algunas de las pautas que pueden servir a la hora de elaborar un Elevator Pitch:
- Hablar en primera persona
- Realizar una breve presentación
- Ser claro y conciso
- Transmitir la información de forma específica
El Pitch de Ventas o Comercial
Este tipo de pitch contempla elementos que buscan apelar a las emociones de las personas. Tiene que ser narrado como una historia. Presentar casos de éxito e introducir un llamado a la acción que permita hacer un seguimiento en futuros acuerdos.
Para ello es necesario, tener claro y conocer bien quién es la audiencia o persona a la que se le va a exponer el proyecto. Este tipo de pitch puede resultar ventajoso a la hora de querer contratar nuevas herramientas o softwares en la empresa. Que se apruebe un presupuesto en el departamento o que se realicen nuevas contrataciones.
Cómo hacer un pitch desde cero: paso a paso
Para desmitificar la idea de que un pitch es algo complejo. Hemos preparado un paso a paso muy práctico para ayudarte a construir tu pitch en pocos minutos.
A continuación te compartiremos los pasos principales que se deben tener en cuenta y cuál es la estructura ideal. Podrás también descargar la plantilla totalmente personalizable para utilizar en su empresa.
1. Identificar el problema: la estrategia de las 5 P’s
Toda solución o idea surge de la constatación de un problema. Por lo tanto, el primer paso es identificar con precisión el problema y sus causas. Lo que facilita la búsqueda de la mejor solución.
Para ello, utilice la técnica de las 5 P’s. Pregúntate “por qué” 5 veces. Primero considerando el problema general y luego profundizando en la cuestión. Por ejemplo, en el caso de una empresa en la que los clientes se han quejado de que sus pedidos se retrasan. Este podría ser el ámbito para entender la raíz del problema, siempre empezando por el “por qué”:
- ¿… Se quejan los clientes?
- ¿… No se cumplen los plazos?
- ¿… El equipo no cumple con los pedidos?
- ¿… No hemos contratado más personal?
- ¿… No pedimos un aumento del presupuesto de contratación?
Las preguntas deben empezar por el primer problema identificado, el más visible para el equipo. Respondiendo a cada una de las preguntas. Tendrás mucho más claras las causas del problema y esto te ayudará a llegar a la solución ideal.
Además, otro consejo importante es reunir todo lo que sepas sobre este tema para solucionarlo. Esto será fundamental para explicar, en tu discurso, cómo se identificó esta situación.
2. La solución ideal: brainstorming
Las respuestas anteriores seguramente te ayudarán a hacerte una idea de cuál es la solución ideal. Sin embargo, el consejo principal aquí es: no te detengas en la primera idea. Haz una lluvia de ideas con tu equipo y exploren todas las alternativas posibles.
En este proceso, siga el siguiente paso a paso:
- Anota todas las ideas que se te ocurran
- Seleccione los que merecen ser explorados
- Considere la posibilidad de combinar más de una idea para llegar a la solución ideal
- Determinar un paso a paso para la ejecución de esta idea
- Seleccione la solución final
Con la posible idea en mente, es el momento de encontrar la manera de justificar. Es decir, demostrar que es posible y que merece la pena. Para encontrar los argumentos perfectos y encontrar las lagunas en la ejecución. Responde a las siguientes preguntas:
- ¿Se planteó la cuestión anteriormente? En caso afirmativo, ¿qué ocurrió?
- ¿Cuál es el mayor reto para poner en práctica esta idea? ¿Cómo podemos superarlo?
- ¿Qué tipo de recursos (presupuesto, tiempo, apoyo) necesita para ello?
- ¿Cuál es el principal beneficio de resolver este problema?
A partir de ahí, y con la idea más clara en la cabeza, empieza a estructurar tu discurso. En los siguientes puntos, le mostraremos cómo.
3. Cómo reforzar tus argumentos
Al ser una herramienta muy objetiva, el pitch requiere priorizar y centrarse en lo que realmente importa. Por lo tanto, evalúe qué datos o información pueden reforzar realmente sus argumentos y demostrar lo que quiere.
Para empezar, pruebe su idea antes de presentarla, siempre que sea posible. Las cifras, los ejemplos y las historias de éxito para demostrar que la solución puede funcionar o ha funcionado antes son una opción.
Además, ofrecer tiempo de demostración o consulta para que tu jefe pruebe la solución en la práctica es una forma de demostrar que realmente confías en ella.
A continuación hemos destacado algunas ayudas visuales que también pueden ayudar en este proceso.
4. Efecto WOW: Visual
El tiempo es oro y la gente siempre tiene prisa. Así que empieza por pensar que tu presentación no es más importante que otras cosas que la gente tiene que hacer. El mayor reto de un discurso es precisamente resumir mucha información en poco tiempo, sin dejarse nada en el tintero.
Por ello, el uso de elementos visuales acelera la asimilación de la información y hace que la presentación sea más interesante. Hazlo interesante, dinámico y fácil de entender.
Sin embargo, tenga en cuenta a su público y tenga cuidado de no crear nada que desvíe la atención de su discurso principal.
Algunos recursos que pueden utilizarse en el pitch:
- Vídeos cortos
- Imágenes
- Gifs
- Animaciones
- Gráficos
- Plantillas
Esto último es la base de su discurso. Intenta crear un diseño diferente para esta presentación, para captar la atención del público. Si quieres agilizar este paso, consulta aquí una plantilla ya preparada para estructurar tu pitch.
5. Prepárate: cómo hacer frente a posibles (y difíciles) preguntas
No importa lo bueno que sea tu discurso. Siempre habrá preguntas difíciles de responder para que la dirección pueda asegurar que tu proyecto es viable.
- ¿En cuánto tiempo verá la empresa el retorno de la inversión?
- ¿Qué cree que pasará si no invertimos en esta solución?
- ¿Qué otras alternativas tiene para el problema? ¿Por qué decidió descartarlas?
- ¿Por qué ahora?
- ¿Qué cambios podemos hacer en el presupuesto para permitir este nuevo proyecto?
- ¿Y sus otras responsabilidades? ¿Se verá afectado algo?
- ¿Afectará la solución a alguien más? ¿Cómo le afectará?
6. Ya estás casi listo, es momento de preparar la presentación
Teniendo en cuenta todo esto y con las ideas y los recursos ya separados, es hora de ponerse manos a la obra. Por lo general, un discurso es mucho más eficaz si va acompañado de una presentación breve y visual, como hemos comentado antes.
Para elaborar su presentación, considere algunos puntos principales:
- Problema
- Solución
- Objetivo
- Plan de acción
- Costes e impactos
- Pantalla final: Resumen
Entre estos pasos principales, considere los más relevantes y sólo inserte en la presentación lo que sea necesario. Dé prioridad a las ayudas visuales que reduzcan su tiempo para explicar alguna información y, si es posible, utilice el texto sólo en los títulos y subtítulos. Lo importante aquí es apoyar y acelerar la comunicación, y no distraer a su receptor de lo que se está diciendo.
💡 Descarga la guía completa y la plantilla totalmente personalizable
⭐️ Consejos de oro:
Graba tu presentación y observa el resultado. Vea si se respeta el tiempo estipulado por usted, observe lo que se puede mejorar en el tono y el lenguaje corporal. Hazlo hasta que consigas el resultado perfecto.
Preséntate a otra persona. Es una forma de aprender a manejar el nerviosismo y de obtener opiniones de alguien que te está observando desde fuera y, por tanto, puede tener una crítica muy constructiva.
7. ¡Hora del espectáculo! 5 consejos prácticos para que tu pitch sea un éxito
Además de tenerlo todo en la punta de la lengua y de contar con la presentación perfecta, algunos consejos pueden ayudar a la hora de hacer el planteamiento a los dirigentes.
Consulte estos consejos prácticos para hacer el pitch perfecto:
- Elija el momento adecuado: evite los primeros días de la semana y dé prioridad a las últimas horas de la tarde. Estos consejos pueden ayudarte a encontrar un momento tranquilo para que el liderazgo te escuche.
- Reserve el lugar adecuado: Encuentre el espacio perfecto para hacer su presentación. La idea es que no corras el riesgo de ser interrumpido. Y que no te encuentres con ruidos y movimientos externos que puedan distraerte.
- Empieza con una o dos preguntas: según una publicación de Forbes, empezar tu discurso con preguntas ayuda a captar a tu audiencia. Y les hace pensar en el problema en cuestión.
- Contacto con el público: Mantenga el contacto visual con su público al menos cada 5 segundos. Si hay más de una persona en la sala, alterne este contacto entre ellas.
- Involucre a su líder: Este es un punto muy importante. Intenta mostrar interés por conocer la opinión de tu líder sobre lo que se propone. Lo ideal es encontrar puntos concretos dentro de tu proyecto en los que ya sabes que él/ella tendrá una sugerencia o crítica y ya prevés que necesitas y confías en su opinión sobre esos temas.
💡 Si todavía no estás seguro de cómo elaborar el pitch perfecto. Echa un vistazo a un ejemplo de estructura de discurso a continuación y descarga la plantilla personalizable para hacer el tuyo.
Ejemplo de la estructura de un pitch perfecto
- Introducción: defina los puntos principales: cita rápida del problema, motivaciones para el pitch y antecedentes rápidos. Esta parte debe ser muy directa y breve.
- Problema: Identifique el problema. Puedes incluir cómo has percibido el problema y algunos datos que refuercen tu argumento.
- Solución: exponga la solución que propone e incluya gráficos, datos o documentos de apoyo. Si has hablado con los miembros de tu equipo y has obtenido información útil de ellos, inclúyelo aquí.
- Plan de acción: presente toda la información que tenga sobre la solución: costes, posibilidades, segundas opciones u otras cuestiones que puedan interesar a los dirigentes.
- Cierre: Entregue o deje en pantalla un resumen del proyecto. Agradece a tu líder su tiempo y atención y permítele hacer preguntas.
¿Por qué hacer un pitch?: la importancia de hacer el pitch perfecto
Errar es humano, pero insistir en el error es una elección. Si alguna vez te han negado una idea o petición en tu carrera, puede ser que no hayas contado con todas las herramientas necesarias. O, simplemente, no conocías el famoso pitch.
Al ser un término bastante nuevo, el “pitch” todavía es poco considerado por los profesionales a la hora de presentar una idea o un proyecto. Mientras que muchos piensan que este formato requiere demasiado tiempo para ser elaborado. Otros creen que las grandes presentaciones dan resultados más efectivos.
¿El resultado? Ideas desaprovechadas, lagunas de comunicación y algunas reputaciones empañadas. Hacer las cosas de cualquier manera tiene un coste, y puede ser muy alto.
Por eso, a continuación destacamos algunas razones por las que deberías considerar la posibilidad de hacer un pitch cuando se trata de convencer a alguien en tu empresa. He aquí la razón:
Menos tiempo, más resultados
Esa frase que dice que el tiempo es dinero nunca ha tenido más sentido. No hay mejor manera de acelerar la consecución de un nuevo proyecto o tarea que utilizar un pitch para presentarlo.
Hoy en día, las demandas y la información llegan de todas partes, a una velocidad nunca vista. Así que competir por la atención de la gente y conseguir unos minutos con ellos es un reto. Cuando hablamos de alguien considerado de nivel C, puede ser aún más complicado.
Así que, para asegurarte de que te escuchan, utiliza el pitching como estrategia. Es mucho más fácil programar una reunión o presentación cuando el tiempo requerido es corto. Cuando resumes tu idea y no haces perder el tiempo a la gente, las posibilidades de conseguir lo que quieres son aún mayores.
Garantiza mejoras para el departamento y sus empleados
Quien hace un discurso, sea cual sea la razón que lo sustenta, busca algún tipo de aprobación. Y esta aprobación está probablemente vinculada a una propuesta que puede aportar mejoras a la empresa, al departamento o incluso al día a día de los empleados.
Por lo tanto, al utilizar el terreno de juego para conquistar este objetivo, las posibilidades de éxito aumentan. Como consecuencia, la aplicación de las mejoras también aumenta significativamente, aportando más productividad, motivación y bienestar a la organización.
Muestra la búsqueda de la innovación
Además de mostrar profesionalidad con una presentación objetiva y dinámica. Los profesionales que utilizan el pitch como herramienta de comunicación suelen aportar ideas innovadoras a la empresa.
Difícilmente se utilizará un terreno de juego para asuntos triviales o para algo que no tenga mucho sentido. En general, esta iniciativa demuestra que el profesional y la zona buscan soluciones innovadoras que ayuden al negocio de alguna manera.
Flujo de comunicación más asertivo
Introducir en la cultura de la empresa el hábito de presentar la información y los proyectos en forma de discurso. Esto puede mejorar mucho el flujo de comunicación interna. No es difícil ver que los equipos pierden horas y horas en largas reuniones o que tocan el mismo punto una y otra vez, sin llegar a ninguna parte.
Por lo tanto, las presentaciones objetivas que se centran en el contenido que es realmente más relevante son muy bienvenidas. Un buen consejo para empezar es promover un taller sobre el tema. Y ofrecer plantillas para que los empleados preparen un pitch de forma rápida y práctica.