La forma en que la empresa se presenta ante los ojos del mundo es lo que se conoce como identidad corporativa. Por supuesto que esta tiene un rol muy importante en la creación de la conexión entre las personas y la marca. De hecho, un estudio realizado por PwC a nivel mundial revela que el 42% de los clientes pagarían más por una marca con la que se sientan conectados.
Ahora bien, trasladado al talento ¿cuál es el papel de la identidad corporativa en el sentido de pertenencia? ¿Es posible aplicar la identidad corporativa como estrategia de retención?
Para poder entender el alcance que tiene la imagen de la empresa en la fuerza laboral, en este artículo vamos a contarte qué es la identidad corporativa, cómo llevar a cabo su diseño, cuál es su importancia, por qué y cómo promoverla entre los empleados.
Tabla de contenidos
¿Qué es la identidad corporativa?
Logotipos, colores, imágenes, sonidos o incluso uniformes para empleados, son algunos ejemplos de cómo se expresa la identidad corporativa. Pero debemos dejar en claro que esto va mucho más allá de esas señas identitarias.
Cuando hablamos de identidad corporativa nos referimos a la personalidad de una marca. Precisamente, el conjunto de elementos a través de los cuales una compañía transmite al mundo quién es, cuáles son los principales rasgos de su carácter, cómo se comporta, en qué cree y cuáles son los valores que la sustentan.
De esta manera, la identidad corporativa es la forma en que una marca se presenta ante el mundo y comunica su propósito y propuesta de valor a sus grupos de interés. Lo que incluye clientes, inversores, socios estratégicos y, por supuesto, empleados.
Enfocándonos en estos últimos, la identidad corporativa es también un concepto global que el personal tiene sobre:
- El lugar en el que trabaja.
- Las actividades que realiza.
- Lo que se ofrece y entrega al público.
- Los comportamientos de la compañía a nivel interno y cómo estos se proyectan al exterior.
- La narrativa que comparte la compañía sobre sí misma hacia sus públicos de interés.
Así, para definir qué es la identidad corporativa, podemos decir que se trata del conjunto de características, valores y creencias con las que una empresa se autoidentifica. Rasgos que le sirven para diferenciarse de las otras compañías. Pero también es la historia, ética, filosofía, políticas, cultura organizacional y normas establecidas.
¿En qué consiste el diseño de la identidad corporativa?
Ahora que tenemos una noción más clara sobre este concepto, es importante saber cómo llevar adelante el diseño de la identidad corporativa. En principio, diremos que este proceso consiste básicamente en darle vida a la marca. Por ello, es clave iniciar con ello incluso antes de que la empresa esté en marcha.
Sin embargo, es sabido que muchos negocios comienzan antes de trabajar todos estos aspectos. Aunque no es lo recomendable, si es ese tu caso, no te preocupes, puedes ocuparte del diseño de la identidad corporativa de tu compañía en cualquier fase de desarrollo en la que se encuentre. Te damos algunas pautas a tener en cuenta:
Realizar una auditoría de marca
La importancia de la identidad corporativa en la percepción de la empresa es clave y por ello resulta fundamental realizar una auditoría de la marca. Básicamente, esto implica evaluar qué posición ocupa actualmente la compañía en el mercado, cuál es su reputación, en qué áreas o aspectos se destaca y en cuáles necesita mejorar. Para ello, algunas gestiones fundamentales son:
- Identificar la percepción del cliente sobre los productos o servicios de la empresa.
- Conocer qué se dice de la marca a nivel general, es decir, las opiniones y comentarios acerca de la compañía por parte del público externo al negocio.
- Realizar un análisis profundo de las estrategias de marca de los competidores.
- Revisar la propuesta de valor de la empresa y su adecuación a las necesidades del mercado objetivo.
- Conocer la opinión de los trabajadores sobre la empresa.
- Evaluar el funcionamiento actual de la cultura organizacional.
- Analizar la estrategia de comunicación e identidad visual de la empresa.
Volver la mirada sobre todos estos aspectos es fundamental antes de tomar cualquier decisión que influya sobre la percepción que hoy tienen sobre la empresa los distintos grupos de interés.
Definir la filosofía empresarial
Una vez que puedas diagnosticar la situación de la empresa, tendrás mayor claridad para replantear las bases de la filosofía empresarial. Es decir, el conjunto de principios y creencias que guían todas las decisiones de una compañía.
Es importante dejar en claro que el objetivo de la filosofía de toda empresa es sentar las bases sobre las que se construirán los productos, servicios, procesos y relaciones a partir de entonces. Por ello, si estás redefiniendo la identidad corporativa de tu empresa es necesario volver a revisar su filosofía. Para hacerlo, puedes enfocarte en responder:
- ¿Qué es y qué hace la empresa? Esta es la misión de la compañía.
- ¿Cómo lo hace? Se trata de definir los valores de la empresa.
- ¿A dónde se dirige o quiere llegar? Finalmente, esto implica revisar la visión y los objetivos de la organización.
Alinear todo ello es clave para poder construir una identidad corporativa que realmente refleje la identidad actual de tu negocio.
Construir la cultura organizacional
En otros artículos ya hemos hecho referencia a la importancia de la cultura organizacional, en tanto, esta determina en gran medida la forma en la que las empresas hacen las cosas. También establece el conjunto de valores y rituales que integran a los miembros de la compañía, así como las normas de trabajo que regulan los comportamientos dentro de ella. Con lo cual, construirla es también construir el sentido de pertenencia en tu equipo.
Así, al ocuparte de trabajar activamente en la cultura de la organización te estás encargando de muchas cuestiones al mismo tiempo. Sobre todo, de desarrollar la identidad corporativa de adentro hacia afuera.
Si bien la identidad de tu empresa se trata de cómo la ven los demás, esa imagen que estás construyendo se proyecta desde el interior. Es ahí donde las personas que integran tu equipo son un eslabón clave y por ello es tan importante promover la identidad corporativa entre los empleados, para que estos transmitan con sus acciones la imagen que deseas.
Precisamente, por eso es necesario cuidar la experiencia de los trabajadores y cómo sienten ellos la marca. Algo que se puede conseguir a través de la construcción de una cultura organizacional cohesiva, 100% centrada en las personas.
👉 ¡No te lo pierdas! Descubre cómo crear la cultura organizacional en pequeñas y medianas empresas.
Establecer una política de comunicación
¿Qué quieres que diga tu marca? ¿Cómo quieres que lo diga? ¿Cuál será su voz, su tono, su estilo? Estas son preguntas que pueden guiarte a tomar acción sobre uno de los aspectos fundamentales en el diseño de la identidad corporativa, es decir, la política de comunicación.
Las compañías se expresan de una determinada manera y esto refleja su personalidad, es decir, es una rasgo de identidad que les ayuda a distinguirse de las demás. Pero es importante que esto también sea gestionado de manera proactiva. La empresa debe definir qué pautas de interacción se tienen que seguir a nivel interno y externo.
Se trata de establecer los lineamientos específicos para guiar a los empleados a cómo interactuar entre ellos y con el público externo. Estas pautas les permiten comprender cómo reaccionar en cada situación, brindar un servicio coherente y cohesivo y relacionarse de forma adecuada con otras personas.
En otras palabras, definir una política de comunicación ayuda a fomentar buenos vínculos entre empleados, mejorar el clima laboral y fortalecer los lazos de la empresa con sus clientes.
Crear la imagen corporativa
Dentro del diseño de la identidad corporativa no podemos dejar fuera el trabajo a realizar sobre la imagen de la marca. Esto es todo elemento visual que se asocie a la compañía. Aquí se debe transmitir la filosofía, la cultura y, en definitiva, la identidad de la organización.
Por ello, es necesario crear una identidad visual que evoque o transmita las sensaciones y emociones que de alguna manera están presentes en la personalidad de la marca. Para conseguirlo se trabajan distintos aspectos tales como:
- Nombre de la marca.
- Logotipo.
- Colores.
- Tipografías.
- Imágenes.
- Composición.
¿Por qué promover la identidad corporativa entre los empleados?
El papel de la identidad corporativa en el sentido de pertenencia
Al momento de trabajar la identidad de la compañía se deben abordar varias cuestiones, como ya hemos visto, desde la misión, visión y valores, hasta la cultura organizacional y la comunicación interna y externa. Todos estos aspectos hacen a la experiencia de los trabajadores y a la percepción que estos tienen del lugar en el que trabajan.
Si entienden la misión, visión y valores de la empresa, tendrán una dimensión más clara del impacto de su trabajo en los objetivos de la compañía e incluso podrán sentirse más conectados con el propósito de su trabajo. Esta es una instancia clave para generar pertenencia.
Al mismo tiempo, al vivir día a día inmersos en una cultura organizacional que los cuida y les impulsa a mejorar, pueden sentirse más valorados, lo que sin dudas, contribuye a su bienestar en el trabajo.
Asimismo, como mencionamos antes, al trabajar en la identidad corporativa las empresas también se esfuerzan por fortalecer su comunicación interna y externa, lo que fomenta relaciones interpersonales positivas, reduce los conflictos laborales, contribuye al trabajo colaborativo y, al final de cuentas, genera un mayor sentido de pertenencia.
La identidad corporativa como estrategia de retención
Todo lo que vimos en el punto anterior claramente influye de manera directa en la retención de personal, porque quienes se sienten valorados dentro de un trabajo difícilmente decidirán dejarlo.
Es importante tener en cuenta que en México, la escasez de talento es un problema que preocupa a cada vez más empresas. A inicios de 2023 desde los departamentos de Recursos Humanos se anticipaba un año de incrementos en la contratación de personal, pero en gran parte motivadas por los altos índices de rotación registrados a lo largo del 2022.
Ahora bien, cuando se revisan las razones que llevan a los trabajadores a ir en busca de nuevas oportunidades laborales, lo más revelador del caso es que son los liderazgos negativos una de la causa más frecuente por la que el talento renuncia. De hecho, una encuesta de Computrabajo indica que el 43% de las personas ha renunciado a su empleo por un mal vínculo laboral con el empleador.
Asimismo, de acuerdo con OCC Mundial, a finales del año pasado, el 24% de la fuerza laboral analizaba renunciar a su trabajo y entre las razones principales figuraban:
- Ambiente tóxico.
- Mala relación con el jefe.
- Incumplimiento de promesas.
- Poco crecimiento salarial.
Hoy el talento busca mejorar sus condiciones laborales, eso incluye el ambiente de trabajo, las posibilidades de crecimiento y las relaciones interpersonales dentro de las empresas. Trabajar la identidad corporativa de adentro hacia afuera es una excelente oportunidad para revisar todos los aspectos que ayudan a mejorar la experiencia del personal y, con ello, la percepción que estos tienen de su entorno laboral.
Así, la empresa tiene mayores posibilidades de conservar al talento por más tiempo gracias a utilizar la identidad corporativa como estrategia de retención.
Los empleados como embajadores de marca
¿Todavía te preguntas por qué promover la identidad corporativa entre los empleados? Pues si la retención de talento no es razón suficiente, también debes saber cómo influye tu personal en la imagen que proyecta tu empresa de cara a los consumidores. Por consiguiente, cómo impacta esto en los resultados del negocio.
Los trabajadores que entienden la identidad corporativa y se sienten parte de ella son tus principales aliados para transmitirla al resto del mundo. Es decir, el público externo, pero también de cara a sus compañeros de trabajo.
Los embajadores de marca son aquellas personas que se dedican a recomendar a una empresa determinada por convicción propia. Su canal de difusión favorito para transmitir esta recomendación suelen ser las redes sociales, donde comparten contenido centrado en la marca.
¿Por qué pensar a tus colaboradores como embajadores de la empresa? Pues porque las estadísticas reflejan cuán contundente puede ser su aporte en este sentido. Te dejamos algunas de las más destacadas reunidas por Hootsuite:
- El 53% de las personas confía más en un empleado normal que recomienda a una empresa, que en un CEO.
- Según un estudio de LinkedIn, los trabajadores de una empresa suelen tener 10 veces más seguidores que la empresa en la que laboran.
- Precisamente, LinkedIn también revela que cuando los empleados comparten las publicaciones de su empresa generan el 20% de todas las interacciones.
- Finalmente, quienes buscan empleo afirman que los empleados actuales de una empresa son la fuente de información más fiable de la misma.
¿Cómo construir una identidad corporativa sólida con la ayuda de tus empleados?
Ahora que conoces el valor de promover la identidad corporativa entre los empleados, no queremos irnos sin decirte cómo construir esta identidad con ayuda de tus colaboradores.
- Organizar el entorno laboral de acuerdo a las necesidades de los empleados. Piensa más allá de comprar mobiliario cómodo. Hablamos de crear un entorno con procesos de trabajo bien estructurados para que el talento pueda realizar su labor en las mejores condiciones. Por ejemplo, para un nuevo empleado, el proceso de inducción debe ser claro, garantizar acceso rápido a toda la información que necesite para ejecutar sus tareas, así como recibir retroalimentación constante para avanzar.
- Favorecer la formación y el desarrollo. Para contribuir al crecimiento del equipo es clave maximizar su potencial brindando oportunidades de desarrollar nuevas habilidades y competencias mediante la formación. Esto ayuda a mejorar el desempeño del personal, los prepara para entregar la mejor experiencia al cliente y consolidar así la imagen que la empresa quiere proyectar.
- Escuchar al equipo. Los aportes de los empleados son fundamentales para construir una identidad corporativa coherente, que esté realmente alineada a los valores y comportamientos de la empresa. Por ello, es clave generar instancias de diálogo donde el equipo pueda compartir sus ideas y opiniones sobre cómo comunicar su valor de cara al público externo.
- Apoyarse en la tecnología. Una vez que se hayan identificado las necesidades del equipo y elegido el camino para un mayor desarrollo, se necesitan implementar herramientas que ayuden a establecer con mayor rapidez el proceso de transformación en la gestión del talento. En este sentido, lo ideal es incorporar recursos tecnológicos que abarquen el conjunto de herramientas de RR.HH. y cuenten con opciones avanzadas de integración con otros sistemas esenciales para las empresas. 👉 Descubre cómo integrar tus herramientas con Factorial.
Suma un software de RR.HH. a tu empresa y fortalece su identidad corporativa
A lo largo de este artículo hemos establecido la importancia de la identidad corporativa en la percepción de la empresa, tanto a nivel interno, como externo. Está claro que trabajar en la identidad de tu compañía puede ayudarte a fortalecer numerosos aspectos que contribuyen a mejorar la experiencia global del talento y, con ello, su retención. Lo que hoy tiene un gran valor teniendo en cuenta la situación del mercado laboral mexicano.
Para poder disfrutar de todas las ventajas que ofrece una adecuada gestión de la identidad corporativa necesitas sumar un sistema que te ayude a agilizar todas las tareas repetitivas y manuales y conseguir más tiempo. Este podrás dedicarlo a ir a lo profundo y entender quién es tu empresa hoy y quién quieres que sea de aquí en más.
Factorial te ofrece todas las herramientas imprescindibles de RR.HH. en un solo sistema. Así puedes ahorrar mucho tiempo para dedicarlo a lo que más importa: el fortalecimiento de tu equipo.
🚀 ¡Recibe una asesoría GRATIS de Factorial y comienza a transformar la imagen de tu marca empleadora!
