Cada vez son más los y las trabajadoras que tienen más exigencias respecto de su profesión. La posibilidad de pasar más tiempo fuera de la oficina, recientemente se ha convertido en un requerimiento clave. La flexibilidad laboral es justamente un concepto que sirve para poder conceder este tipo de beneficios a candidatos y empleados.
En este artículo veremos qué es y cuáles son los beneficios de implementar la flexibilidad laboral en tu organización. Entre otras cosas, permite llevar a cabo la conciliación laboral y familiar. Los beneficios del trabajo flexible pueden ser tantos en aspectos de gestión horaria, como en el día a día de nuestro trabajo.
Tabla de contenidos
Qué es la flexibilidad laboral
La definición de flexibilidad laboral la presenta como libertad. Aquella que los profesionales tienen para elegir el momento, la ubicación y la manera en la que trabajan. Es una metodología íntimamente relacionada con las nociones de teletrabajo y trabajo híbrido, solo que abarca mucho más.
También conocido como trabajo flexible, este concepto implica que, al gestionar una plantilla, se prioricen tanto las habilidades y competencias de los trabajadores, en cuanto desempeño laboral, como otros aspectos. Por lo tanto, se pone en primer plano a las personas, poniendo de manifiesto una preocupación y acción proactiva por su bienestar.
COVID y flexibilidad laboral
La flexibilidad en el trabajo implica, además, brindar otro tipo opciones y alternativas que ayuden a satisfacer las demandas de los profesionales. Este tipo de flexibilidad debe aportar beneficios que hagan del employee experience una vivencia única, para conseguir que disminuya, por ejemplo, la tasa de rotación.
Tanto así que, de acuerdo a un reporte publicado por la consultora EY Global, el 54% de los empleados en la franja de edad considerada millennial. Es decir el talento joven, consideraría dejar su trabajo después de la pandemia de COVID-19. Si no se les brinda algún tipo de flexibilidad en el lugar y el momento en que trabajan. La muestra que se tuvo en cuenta para el sondeo, recopiló datos de más de 16.000 empleados en 16 países y en múltiples industrias y puestos de trabajo.
Tipos y ejemplos de flexibilidad laboral
La flexibilidad laboral en sí misma, como casi todo lo referido a RR.HH., no cuenta con recetas mágicas o fórmulas infalibles. De hecho, en este tipo de cuestiones siempre lo mejor es experimentar y diseñar estrategias de recursos humanos, basadas en lo que conocemos acerca de nuestros valores, cultura de empresa y preferencias de cada trabajador o equipo.
Sin embargo y, en líneas generales, existen al menos cinco tipos o modelos de flexibilidad laboral que pueden llevarse a cabo entre empleadores y su plantilla, para sustentar esta modalidad dentro y fuera de la oficina:
Trabajo híbrido
Sin duda alguna, el modelo híbrido es el tipo de trabajo flexible imperante y que cada día crece más. Lo que comenzó como una tendencia en Recursos Humanos. Hoy en día se ha convertido en la realidad de miles de empresas en todo el mundo.
El trabajo híbrido implica obligadamente generar un contrato de teletrabajo si la jornada laboral del trabajador fuera de las oficinas, excede más del 30% del tiempo. Sin embargo, la forma en la que se lleve a cabo queda a criterio de ambas partes. Pudiendo combinarse dos días de presencialidad con tres a distancia, ofreciendo más libertad a la hora de organizar tareas y espacios de trabajo.
Flexibilidad horaria
La flexibilidad horaria es un acuerdo laboral. En los que los empleados tienen la libertad de seleccionar cuándo comienza y termina su jornada. Siempre que la suma total de las horas trabajadas vaya acorde a las exigencias de la ley y de su tipo de contrato.
Este tipo de trabajo flexible consiste en que el profesional pueda optar por trabajar de 11 a 19 horas y de 08 a 16 h, en lugar de realizar el fichaje de 09 a 17 horas. En algunos modelos, los trabajadores también pueden extender sus horas en un día para reducirlas en las jornadas sucesivas, todo esto teniendo en cuenta no exceder o computar horas extras al finalizar el mes.
El horario flexible puede ser especialmente útil para los empleados que puedan necesitar adaptarse al trabajo con otros compromisos. Sobre todo en casos de personas con familiares a cargo o que deban transitar largas distancias entre la oficina y el domicilio particular.
Semana comprimida
Otra modalidad de flexibilidad laboral que no es tan popular, de momento, es la semana comprimida o condensada. Este tipo de acuerdo de trabajo flexible contempla las horas de trabajo estándar, por ejemplo, 42 horas semanales. Solo que en lugar de distribuirse en forma tradicional o de lunes a viernes, se reduce la cantidad de días.
En la enorme mayoría de los casos, esto trae consigo la famosa “semana laboral de 4 días”, solo que cada jornada de trabajo puede que se extienda hasta dos horas para alcanzar el máximo requerido. O, por el contrario, mantener las ocho horas diarias pero reduciendo por cuestiones lógicas, la retribución salarial.
El principal beneficio es ganar un fin de semana de tres días, el cual permite dedicar mayor tiempo al ocio y a la vida personal de los trabajadores, contribuyendo, entre otras cosas, a la reducción del estrés laboral.
Workation
Este modelo de flexibilidad laboral permite hibridar el tiempo libre con las horas dedicadas a la vida profesional. Es similar a lo que entendemos como viajes de negocios, pero necesariamente tratarse de esto.
Las workation implican que una persona pueda desplazarse fuera de la oficina, incluso a otro país. Con los costes retribuidos por la empresa, sin estar del todo desconectado o desconectada, pero sin tampoco estar trabajando plenamente.
Al mismo tiempo, un trabajador puede mantener este nivel de actividad estando dentro de la oficina también. Siendo el principal beneficio de este tipo de actividad. Poder aprovechar al máximo los períodos de baja actividad comercial sobre todo en industrias que dependen fuertemente de la estacionalidad.
Trabajo compartido
Es una forma poco usual y mucho depende de su implementación, aquello que dicten las leyes de recursos humanos. Pero en pocas palabras, se trata de ocupar dos personas en modalidad de contrato parcial. Para realizar las actividades que podría hacer una sola bajo un contrato a tiempo completo y garantizar el trabajo flexible.
El principal atractivo para los empleados de este tipo de acuerdo es contar con más tiempo libre para cuestiones personales, como sucede con cualquier empleo. Mientras que para las empresas, los ahorros en costes de gestión pueden ser significativos. También puede ser beneficioso en los casos en que un empleado se ausenta. Lo que significa que el rol aún se puede cumplir de alguna manera.
Los acuerdos exitosos para compartir el trabajo dependen de que el trabajo se divida limpiamente para que todos sepan lo que están haciendo en todo momento. También es necesaria una buena comunicación interna para evitar cualquier tipo de solapamiento entre ambos roles y contar con un sistema óptimo de gestión de turnos.
Beneficios de la flexibilidad laboral
Al momento de decidir si es oportuno implementar políticas de empresa y de gestión, orientadas a la flexibilidad laboral, es de vital importancia conocer las mejoras que reporta para la gestión de talento. El trabajo flexible trae consigo una serie de beneficios que facilitan el día a día de nuestros trabajadores y proyecto.
Reduce la tasa de rotación
La principal ventaja en la actualidad es que, a mayor flexibilidad, mayores serán las posibilidades de atraer. Y conservar el talento. Este es de hecho un factor fundamental y determinante al momento de garantizar el crecimiento sostenido de las empresas. Esta es la principal razón que haga una persona vuelque sus preferencias en favor de quedarse. O permanecer en su puesto de trabajo.
Menos estrés
El trabajo flexible se aleja de las presiones horarias, de largas “horas silla” que cumplir sin motivo aparente y de otras costumbres de antaño. Sin obligaciones vinculadas con la prespecialidad y sin tener que perder tiempo en el transporte público. Los profesionales ven una mejoría significativa en su vida laboral, lo que se traduce en un mejor clima y mayor motivación para cumplir con sus obligaciones.
Mejora la productividad
Trabajadores que quieren quedarse en nuestra empresa. Y que, además, trabajan no solo por necesidad sino por gusto, dan como resultado una ecuación en la cual la eficiencia y la eficacia, reinan. La productividad no solo se trata de trabajar bien, sino de hacer más en menos tiempo y esa es una de las ventajas que ofrece la flexibilidad laboral.
Empresas con trabajo flexible
De acuerdo con un estudio publicado por el Foro Económico Mundial, un 48% de los trabajadores en Estados Unidos optará por trabajos que integren el trabajo remoto o semi remoto, es decir, trabajos flexibles. Esta tendencia, que se replica alrededor del mundo, hace que cada vez sean más las organizaciones que optan por brindar modalidades de empleo que contemplan la flexibilidad laboral.
Un ejemplo de flexibilidad laboral es el caso de American Express. La empresa ha adaptado a un modelo de programación más flexible para sus trabajadores. A pesar de tener una plantilla con más de 50.000 empleados en todo el mundo. Y ofrece oportunidades que varían de acuerdo a la tipología de contrato: a tiempo parcial, completo y a distancia/teletrabajo.
Por su parte, Colgate-Palmolive es otro ejemplo de flexibilidad laboral. El gigante de productos cosméticos y de higiene personal cuenta con 37.000 trabajadores en todo el mundo. Optó por un programa de flexibilidad que contempla aspectos como horarios flexibles. Conciliación familiar con guarderías y cuidado de niños en sus instalaciones.
El último ejemplo en tema de flexibilidad laboral es el gigante informático Dell. Adoptó recientemente una estrategia de trabajo híbrido y remoto. En total, casi el 60% de toda su plantilla de trabajadores se desempeña en modalidad totalmente a distancia. O combinando jornadas presenciales y remotas.
Otros modelos de flexibilidad laboral
Si bien este modelo de trabajo se centra en la libertad horaria. También se adentra en aspectos de retribución o espacios de trabajo. De esta manera, el trabajo flexible también se puede adaptar a otros ámbitos de los recursos humanos:
Flexibilidad salarial
La retribución que reciben los profesionales está cambiando. La manera en la que se calcula no se relaciona únicamente con las tareas y responsabilidades pertenecientes a un cargo en concreto. El salario de un trabajador se relacionaría más a la productividad colectiva de la empresa.
Sin embargo, de la misma manera que la retribución a recibir se relaciona con el rendimiento o desempeño del empleado o empresa, también ayuda en otras cosas. La flexibilidad salarial también permite moldear de manera más fácil los horarios de los profesionales. Así, en épocas de crisis, en caso de que se tengan que disminuir los gastos de la empresa. Una opción sería la reducción de la jornada laboral y, respectivamente, del salario, en lugar de terminar el contrato.
Flexibilidad de tareas
El multitasking tradicional. Es un modelo de trabajo flexible que se enfoca en aprovechar los diferentes conocimientos que un profesional pueda tener. Y su ambición por formarse o dedicarse a más de una tarea.
Este tipo de flexibilidad laboral trae consigo una mayor productividad, así como una plantilla con más capacidad de asumir tareas. Pero también puede afectar negativamente, al dificultar la capacidad de priorización en según qué responsabilidades.
Si no se realiza de manera correcta, también puede provocar menor atención y, respectivamente, una calidad inferior en la realización y entrega de proyectos.
La flexibilidad laboral se posiciona hoy en día, como el teletrabajo en su momento pre-pandemia. Se trata de una modalidad que poco a poco se extiende y gana más popularidad. Que constituye una excelente herramienta para conservar talento desde recursos humanos. Y una opción clave para mejorar la calidad de vida y satisfacción de los empleados.
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